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Liderazgos de Chile

Manfred Max Neef: referente para las y los nuevos liderazgos

Agentes de Cambio

Las y los nuevos liderazgos también tienen referentes. Y dentro de aquellos, Manfred Max Neef es sin duda uno de los grandes nombres que asoman como una de las personalidades más influyentes para la economía y el medio ambiente.

por Factor Liderazgo | 16 de septiembre 2020

“La economía está para servir a las personas… y no las personas para servir a la economía” decía el ganador del Premio Nobel Alternativo de Economía, Manfred Max-Neef quien murió el 8 de agosto del 2019. Sin embargo, como todo gran líder, sus ideas, reflexiones y propuestas de desarrollo sustentable permanecen en el tiempo. 

Su biografía oficial describe a Max-Neef como “el gigante barbado que sólo a regañadientes se pone un traje y prefiere la práctica ropa de trabajo. ¿Se ve así un profeta del Viejo Testamento?” Interesante pregunta, porque ¿cómo debe lucir un líder? Tal vez el economista y autor del libro “Economía a escala humana” nunca estuvo muy interesado en cómo lucía, sino más bien en transformar las leyes económicas y orientarlas a un camino más sustentable y responsable con el desarrollo integral del ser humano.  

Aquel hombre fue un adelantado para su época. Nació el 26 de octubre de 1932 en la Quinta región de Valparaíso. Su padres eran alemanes que llegaron al país luego de la primera Guerra Mundial y a pesar de las terribles vivencias de la época, en su casa nunca faltó la música y la alegría. Su madre le enseñó de pequeño sobre el humanismo y su padre sobre economía; lo que inevitablemente determinó su futuro. 

 

Manfred Max-Neef estudió economía e integró desde muy joven la empresa internacional Shell, lugar donde ocupó un cargo directivo a mediado de los ‘50. Sin embargo, sus intereses no estaban ahí,  sino más bien en los problemas de aquellos países en vías de desarrollo. Desde ahí su carrera tuvo un giro importante.

Son los esfuerzos humanos, sus necesidades y su relación con el medio ambiente lo que cautiva su atención. Y justamente es aquello lo que motiva su tesis de economía a escala humana donde propone nueve necesidades básicas: la subsistencia; protección; afecto; comprensión; participación; creación, ocio; identidad; y por último, la libertad. A partir de estos postulados, el economista y ecologista proponía que no había una relación directa entre el nivel de desarrollo económico y la felicidad de las personas. 

Sus grandes ideas lo llevaron a ocupar un rol importante en diferentes universidades de Estados Unidos y América Latina, fue rector de la Universidad Austral en Valdivia y trabajó para múltiples organizaciones de la ONU. Si bien el reconocimiento y su legado no se mide en premios, fue galardonado en 1983 con el Premio Nobel alternativo de Economía por sus propuestas para el desarrollo sostenible. 

Y este dato puede que muchos no lo recuerden, pero en 1993 ¡fue candidato a la presidencia de Chile! Apoyado por diversas organizaciones sociales ecologistas y  comunidades mapuches, entre otros.

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